El
océano ondulaba su traje de marea
Meciéndose
con las canciones
Que el
viento le dedicaba
Su
blanca espuma se fundía con las criaturas
Que en
su vientre se gestaban
Que en
sus entrañas flotaban
Respiraban
las chimeneas
En el
fondo de su sangre
Ascendían
confusas
Burbujas
de aire
Peinaba
sus cabellos
La mar
inmensa
Con la
arena de la costa
Con
los susurros de Sela
Y ésta
en la orilla
Vestida
de esmeralda
Cantaba
a la mar
Antes
en calma